Amar en tiempos revueltos

Ramón, con la mediación de Encarna, consigue un precario perdón de su hija, así como restablecer con Marta la situación acordada cuando se concertó el matrimonio. La aparición de Juanito el Chico, al que creían muerto, ha causado una gran sorpresa.

Manolita está obnubilada por el nombramiento y José María aprovecha el desconcierto para arrimarse. Marcelino está un poco mosca y se inventa una excusa para ir a los Almacenes a ver qué pasa, pero en el último momento se arrepiente y no entra.

Clementina, en los Almacenes, habla de los hombres, en general, y de los militares y policías, en particular, diciendo que son muy aficionadas a ir con prostitutas.

Ana se acerca cada vez más a su madre, manteniendo una actitud hostil hacia su padre. Julieta vuelve al Morocco después de dos días de ausencia y de recibir la visita de un alarmado Pablo.

Encarna y Ramón, preocupados por la actitud cada vez más maternal de Marta, tratan de obstaculizar el creciente acercamiento entre ésta y su hija. Alfonso anuncia a Carmen y Pascual que tendrá su primer combate al día siguiente.

Encarna convence a Ana para que renuncie al viaje con Marta. Además, Marta amenaza a Encarna con contarle a su hija toda la verdad si no deja de interponerse entre ellas.

Pelayo y Marcelino eluden a Enriqueta y Manolita ante el temor de que éstas descubran la gravedad de la enfermedad de Enriqueta. Loli ha pasado la primera noche en el calabozo tras la cual mantiene su versión de que Héctor intentó violarla.

La suspensión temporal de Héctor a raíz de las acusaciones de Loli dan lugar a variadas elucubraciones en El Asturiano. En los Grandes Almacenes todos intentan ocultárselo a Teresa, pero ésta acaba por enterarse y queda muy impactada.

Héctor aborda a Loli pidiéndole explicaciones por la falsa denuncia que interpuso contra él y Alfonso, que ve cómo forcejean, se lo cuenta a su hermana. Ovidio rompe ante Héctor la denuncia por intento de violación.

En el Morocco empiezan a haber problemas porque Loli pretende que Julieta despida a Celia o no le facilitará la droga que necesita.

Juanito el Chico sigue haciendo planes para cuando le quiten la escayola, y el hecho de que el azar pusiese una bicicleta en su camino, le hace soñar con dedicarse profesionalmente al ciclismo.

Han pasado dos meses y nos encontramos a principios de octubre de 1950. Encarna ha encontrado el local idóneo para una sucursal de los Almacenes, pero parece que existe un problema.

La teoría de Ovidio sobre el asesino único es aceptada y él se encargará de la investigación. Un nuevo dato: la última víctima llevaba puestas unas esposas de policía.

Se sigue abriendo la brecha entre Plácida y Valentina. José María va a ver al perfumista para tantear sus intenciones sobre el local que Ramón Rivas codicia.

Teresa se lamenta ante Ana de que ha vuelto a mostrarse torpe e insegura con Héctor. Juanito el Chico se vuelca en la búsqueda de un empleo que le permita contribuir a los gastos de Sole.

Ramón comprende que la táctica empleada por José María con el perfumista marroquí ha sido equivocada y Ana descubre que su familia quiere comprar el local a cualquier precio.

Pablo asume tareas de dirección mientras Julieta está indispuesta y Celia, que es visitada por Ovidio, observa cómo su marido congenia a la perfección con Cora, la nueva estrella.

Ana está hecha polvo por su metedura de pata con Héctor. Todos le aconsejan que aclare el asunto, pero cuando va a hacerlo se encuentra con que Héctor parece estar divirtiéndose mucho con otra.

Ovidio continúa sus galanteos a Celia y los celos de Jacinto aumentan. Alfonso ha recibido el encargo de darle a Simón su merecido por dejar recibos de la radio pendientes de pago.

En la familia Rivas siguen los enfrentamientos y Marta declara la guerra a Encarna: por fin ha comprendido que su verdadera enemiga es ella y no Ramón.

Teresa y Héctor reconocen que están enamorados aunque entre ellos no han concretado nada, ni siquiera ha habido una declaración. Héctor recibe la bronca de Ovidio por el caso de los Almacenes.

Simón decide irse a una pensión porque tiene pensamientos hacia Carmen cada vez más turbadores y Pascual le ha comentado que ha echado mucho de menos a su mujer y quiere reconquistarla.

Teresa, ilusionada por la declaración de Héctor, pone a su madre al corriente de lo ocurrido. Carmen se ofrece a buscar el momento adecuado para contárselo a Pascual.

Los excesos extramatrimoniales de Ramón le alejan de Marta y cada vez es más evidente la brecha que se ha abierto entre ambos. Encarna encuentra una camisa de Ramón manchada de carmín y le acusa de ser un enfermo sexual.

Juanito ha substituido a su amigo el Chico en su trabajo y tiene problemas con Sole porque cree que está protegiéndolo demasiado. Por su parte el Chico se ha volcado de lleno en ayudar a Julieta a dejar las drogas.

Encarna se da cuenta que su plan, trazado desde hace mucho tiempo, se está desvaneciendo. Poco a poco está perdiendo el control de la familia y por eso decide tomar cartas en el asunto y darle a Ramón lo que un día le negó.

Teresa sufre un ataque de pánico y Ana se queda a cuidarla. Cuando Pascual regresa de la comisaría se encara con las dos, especialmente con Ana, quien considera responsable de haber propiciado un noviazgo imposible.

El actor insigne pide a José María que busque entre las empleadas del almacén una doña Inés que pueda acompañarle en la célebre escena del sofá que va a representar en los almacenes.

Es el día de Todos los Santos y Enriqueta quiere ir al cementerio a visitar la tumba de su primer marido. Una vez allí, Enriqueta pide a Pelayo que la deje sola con su primer marido.

Enriqueta, en su proceso de regresión, vuelve a revivir la situación de pedir permiso a su hijo para casarse con Pelayo. Enrique se lo concede y Enriqueta elige, muy ilusionada, el atuendo para la ceremonia.

En la recreación de la obra de Don Juan Tenorio, Valentina y José María acaban haciéndose con un papel importante en la misma. Juanito Chico sucumbe a la peligrosa tentación del mundo de las drogas.

Pascual se molesta al descubrir que Carmen y Simón se han confabulado a sus espaldas para ayudar a Héctor en su relación con Teresa.

Entierro de Enriqueta. Sole y Juanito Grande, que han regresado precipitadamente, se presentan también en el cementerio. Pelayo está fuera de sí y cuando vuelve a casa, no quiere salir del dormitorio. Marcelino y Manolita se quedan muy preocupados.

Alfonso está detenido en Comisaría y Carmen decide acercarse para interesarse por su situación. Por otro lado, Ovidio pide a Pascual que convenza a Alfonso para que delate a los cabecillas a cambio de su libertad.

La casa de los García no pasa por un buen momento debido a la detención de Alfonso. Pascual y Carmen están muy enfrentados y Teresa tiene un amargo encuentro con Héctor.

Ramón ha conseguido el piso para Marta y lo acondiciona para su trampa. Marta le dice a Ana que aquel piso será una válvula de escape para las dos, acordando incluso señas para no molestarse.

Pelayo logra superar su abatimiento y va por primera vez a la plaza desde la muerte de Enriqueta. Ramón comunica a Marta que ha sido nombrado miembro de un comité asesor del Ministerio de Comercio.

Tras el apagón que ha durado unas horas, la luz se restablece en el barrio y en el estudio de Marta donde Héctor y Ana han hecho el amor. Héctor es presa de los remordimientos.

Ovidio sospecha de Héctor como posible asesino de Valentina. Héctor habla con Ana y le cuenta la situación, está acorralado, aunque por el momento callará.

Carmen, añorando la paz que imperaba cuando Simón mediaba con su familia, decide mandarle una carta, pero no es muy ducha escribiendo. José María y Alfonso se acusan mutuamente de haber asesinado a Valentina.

Sigue la tensión entre Ovidio y Héctor por no querer explicar éste con quien estuvo la noche del crimen. El policia vuelve a ser relegado a asuntos menores y, a través de Marcelino, obtiene información importante sobre la noche del crimen.

Héctor, fuera de control, está a punto de estrangular a Ovidio, quien le cuestiona si así es como asesina a las mujeres. Héctor acaba confesando que la noche del crimen estuvo con Ana.

Teresa, al notar distante a Ana, quiere aclarar las cosas con ella pero el desconcierto se agranda cuando Ramón, en mitad de los Grandes Almacenes, harto del acoso al que Ovidio somete a Ana, acaba revelando ante todos que es su hija.

Simón vuelve de viaje. Carmen cree que es gracias a la carta que le escribió pero Simón le aclara que ha regresado porque se lo ha pedido su amigo Pascual, porque siempre estará a su lado cuando le necesite.

Teresa deambula por las calles de noche generando una gran preocupación en su familia. Héctor echa en cara a Ana que mintiera acerca de su verdadera identidad. Ana se siente sola y confusa y sólo encuentra consuelo en Encarna.

Cora se despide de Jacinto de manera muy emotiva y presenta a Celia como su sucesora, cantando juntas una pieza. Por otro lado, Héctor recibe la bronca de Ovidio por haber desaparecido cuanto más trabajo había y le manda a casa hasta nueva orden.

Adelaida le cuenta que su ceguera se debe a un bombardeo durante la guerra en el que perdió a su padre. Carmen descubre que Pascual interceptó la carta que le había escrito a Simón y teme que la haya malinterpretado.

Carmen informa a Simón de que la carta que le escribió durante su ausencia fue interceptada por Pascual. Carmen teme que su marido haya malinterpretado el contenido y haya creído que alberga sentimientos impropios hacia su amigo.

Pascual impone una vigilancia férrea a su amigo Simón y a Carmen. Ambos se dan cuenta, pero no se atreven a decir nada para no empeorar las cosas, ya que temen que la historia de celos de antaño se vuelva a producir.

La tirantez provocada por Pascual continúa. Carmen comienza a estar harta de sus constantes insinuaciones y Simón ve resquebrajarse su amistad con Pascual.

Hay inquietud entre los empleados del Morocco ante el difícil momento que atraviesa Julieta, dominada por los remordimientos provocados por la muerte de Juanito el Chico. Julieta ha encontrado un vidente que dice estar a dispuesto a ayudarla.

Clementina se compadece de la mala suerte de su antiguo jefe y apoya a José María ante una clienta muy pesada. Salomón, el vidente, aprovecha el estado de debilidad de Julieta y recomienda ceremonias de limpieza de la casa y del espíritu.

El marido de Sole tiene un inmenso sentimiento de culpa por la muerte de Juanito Chico y no levanta cabeza. Su mujer ya no sabe como ayudarle, pero la intervención de Doña Paquita, propiciando un obituario dedicado al amigo fallecido, ayuda a Juan.

Héctor le pide a Sole que lo ayude en una de sus investigaciones, pero Sole no quiere participar en esa clase de trabajo. Aun así, acaba dejándole una cámara, y Héctor termina sincerándose con la fotógrafa acerca de su soledad.

Ana intenta por todos los medios volver a recuperar la amistad que la unía a Teresa. Sin embargo, esta se muestra muy orgullosa y la rechaza. Por otro lado, Ramón se reencuentra con Julieta en el Morocco en el curso de una partida de póquer.

Héctor descubre una prueba sorprendente en relación al asesinato de Valentina. Por otro lado, Alfonso no quiere cobrar un cupón de los ciegos para no encontrarse con Adelaida y le pide a su hermana que lo recoja por él.

Julieta va a ver a Salomón para apaciguar a los muertos que la mortifican, tras la visión aterradora de la sombra de un ahorcado en su casa. Durante ese encuentra, Julieta consigue comunicarse con Juanito Chico.

Salomón sigue cerrando el cerco en torno a sí mismo haciendo que dependa cada vez más de él y socavando su voluntad. Sole le da una explicación racional a Juan Grande cuando éste descubre que el rostro del Chico ha empezado a desaparecer de una foto.

Carmen debe disimular su desilusión al ver que Simón escribe cartas de amor a su nueva novia. Realmente, es el propio Simón quien se escribe esas cartas y usa una falsa fotografía sacada de una caja para hacer ver que es de su novia.

Sole ve la foto que la acompaña y le explica a Carmen que la mujer de la foto está muerta desde hace tiempo. Carmen está convencida de que Simón hace todo eso porque la quiere a ella.

En un emotivo relato que despierta sentimientos dormidos en Mario, Andrea desgrana todos los pormenores sobre su encuentro, cómo la ayudó a salir de España y cómo le salvó la vida en un arriesgadísimo viaje.

Marta teme que su poder de influencia con su hija decrezca a favor de Encarna por maniobras de esta. Teresa se da cuenta que Alfonso está enamorado de Adelaida, pero no lo quiere admitir. Por otro lado, se produce un incidente en el Morocco.

Celia intenta por todos los medios hablar a solas con Julieta, es evidente que la quiere advertir de algo. Cuando consigue encontrarse con ella en la casa de Julieta, le aparece Salomón que ha simulado ser Julieta, usando la voz de esta.

Salomón comienza a presionar a Celia para que le ayude a extorsionar a Julieta como lo hacían en los viejos tiempos en Cuba. Por otro lado, Adelaida cuenta a Teresa que tiene un hermano escondido y que lo hace para evitar que lo ejecuten.

Pablo acude a Héctor para que le ayude a desenmascarar a Salomón y evitar que se siga aprovechando de Julieta. El detective cree que el timador ha sido lo bastante astuto para no cometer ningún delito y duda de que se pueda hacer algo contra él.

Julieta desatiende una vez más sus labores empresariales, lo que hace que los empleados del Morocco, liderados por Pablo, se reúnan para acordar medidas que eviten que el negocio se acabe yendo a pique.

Pelayo obliga a Sole a hacerse pasar por su hija y se convierte en protagonista principal de una mascarada perpetrada en confabulación con los empleados del Morocco para demostrar a Julieta que su amigo Salomón es un estafador.

Julieta va a El Asturiano para dar las gracias a su gente por la colaboración para desenmascarar a Salomón, quien no logra que aquella le readmita en su vida. Cree que la culpable de todo es Celia y le amenaza con que se vengará.

Carmen prepara con mucho esmero la cena a la que ha invitado a Simón y a su presunta novia, pero está segura de que la novia no irá porque no existe. Para su sorpresa, la novia finalmente aparece.

Celia se entera de que Julieta creyó ver a Juanito Chico por la calle y decide contrarrestar la influencia que cree está sufriendo su jefa por parte de Salomón.

Las sospechas de Manolita acerca de una posible infidelidad de Marcelino aumentan; la realidad es que Marcelino debe ingeniárselas para acudir secretamente al encuentro de Andrea, con el fin de prepararla como camarera para la fiesta.

Teresa ha decidido presentarse a las elecciones de representante sindical, pero no se atreve a anunciarlo en su casa porque nota que hay ciertas reticencias. En los Almacenes no toman bien su decisión, ya que Ramón prefiere a José María.

En el baile de la embajada están a punto de encontrarse Andrea y Ramón, pero Mario logra evitarlo. Aprovechándose de su disfraz de camarera, Andrea intenta verse a solas con el mago para que le facilite la dirección de su próximo contacto.

Andrea no logra dar con la compañía de circo ambulante que va a ayudarla en la misión de salvar a Fernando. Mario se niega a dejarla sola y se compromete a buscar a sus enlaces mientras ella se refugia en la casa de citas.

Ramón reprende a Ana por no haber ajustado las elecciones sindicales a su gusto y no haber conseguido que José María fuera el ganador. Tampoco la victoria de Teresa es aceptada con demasiada alegría por Pacual y Alfonso.

Manolita después de recuperarse del shock de ver a Andrea viva, y aceptar que ella no es la amante de Marcelino, recrimina a su marido que la haya engañado, ocultándole toda una doble vida.

Ovidio realiza una redada en la casa de citas donde se hospeda Andrea y ésta es detenida y humillada por el comisario. Mario, alertado por Marcelino y ayudado por Manolita, se presenta en comisaría y miente por Andrea.

Héctor muestra a Julieta las fotografías que le sacó, aumentando la confusión en la mujer ya que el personaje que aparece retratado junto a ella es idéntico al fallecido Juanito Chico. Julieta descubre que ese hombre se llama Lázaro.

Una sorprendente noticia aparecida en el periódico altera la vida del barrio: la Tierra será muy pronto atacada por los marcianos, pero Pelayo descubre un método para hacerles frente, la telepatía.

Marcelino intenta informar a Andrea de dónde se halla la compañía itinerante de circo que anda buscando, pero un desafortunado percance se lo impide al final. Por su parte, Teresa vuelve a reivindicar una subida de sueldo a Ramón Rivas.

Andrea simula su partida a Francia para que Mario le dé libertad de movimientos pero éste la descubre. Andrea y Mario irán juntos al lugar donde ensaya una troupe circense, el contacto que le dio el mago.

La aparición del pequeño salvaje ha dejado a Sole sin dormir en toda la noche. Pese a que el niño la ha agredido, se despierta en ella un interés por encontrarlo, el mismo interés que Manolita pone a la hora de buscar al hijo de Luisa.

Definitivamente Carmen se marchará con Pascual al pueblo. Pascual se siente reconfortado por el hecho de que su mujer le acompañe y, de paso, evita dejarla sola en Madrid. Simón sigue con su farsa aunque hay un ligero acercamiento con Carmen.

Teresa y Alfonso se hacen confidencias, pensando en un futuro mejor. Alfonso tiene un encontronazo con Ana y, después de descubrir la escritura de los ciegos gracias a un invidente, logra dejar un mensaje en braille en la casa de Adelaida.

Leonor, que está resfriada y no puede salir, le pide a Sole que vaya a llevar comida a su amigo, el niño abandonado, y luego se vaya porque si se queda el niño no saldrá.

Ramón arremete contra Teresa por haber falsificado los documentos sobre su edad cuando fue contratada. Ana da la cara por ella ante su padre pero Teresa rechaza su ayuda.

Ramón Rivas despide a Teresa de los Almacenes sin darle opción a defenderse. Simón confiesa a Sole que su amor por la prostituta es una farsa y que solo ha fingido delante de todos para ocultar sus sentimientos hacia Carmen.

Simón irrumpe en casa de Ana con el ruego de que interceda ante su familia para que Teresa sea readmitida en los almacenes. Encarna aconseja a su nieta que se mantenga al margen.

Simón recibe las amenazas del chulo de la prostituta a la que hizo pasar por su novia. Quiere más dinero y Simón no lo tiene. Teresa vive con tristeza su primer día sin ir a trabajar a los Grandes Almacenes. Sólo Carmen trata de reconfortarla.

Sole no consigue que el pequeño que vive en un descampado coma lo que le prepara. Se han iniciado obras y parece que se haya marchado de la zona, pero aparece en la casa de Sole y finalmente Juanito impide que se vaya.

Mientras Marcelino y Manolita esperan a Héctor en el bar, todos son sorprendidos por el grito de un sereno en media noche. El cadáver de la prostituta que fingía ser novia de Simón ha sido encontrado en plena calle.

Ovidio, muy a pesar suyo, no puede acusar a Héctor de ser culpable del asesinato de la falsa novia de Simón, ni tampoco puede implicar a Simón, pues estaba en el calabozo cuando ocurrió el crimen.

Ana confiesa a su padre que Héctor es su amante a fin de evitar que él sospeche el motivo por el que está en el despacho del detective. Ramón y Ana se atacan con recriminaciones mutuas hasta que Encarna logra apaciguar los ánimos.

La inminente ejecución de Fernando preocupa de sobremanera a Mario, Alicia, Álvaro y Marcelino, aunque mantienen la esperanza de que el Papa pida clemencia a Franco y Fernando pueda salvarse.

Ana encuentra en un consejo pugilístico de Alfonso la clave para tratar de soportar las dudas que le asaltan después de la tremenda información que recibió de Héctor, y para ganar tiempo se muestra amable con su familia.

Ana miente a Encarna y Ramón sobre lo que de verdad le preocupa, la noticia de que Marta no es su madre, y logra convencerles de que es el despido de Teresa lo que la tenía alterada últimamente.

La noticia de la muerte de Fernando ha llegado a los periódicos. Pelayo y Marcelino se preguntan a dónde van a parar los cuerpos que nadie reclama. Adelaida convence a César para abandonar el piso.

Contra la opinión de Juanito, Sole decide hacerse cargo de los cuidados del niño salvaje, se lo lleva a su casa y consigue bajarle la fiebre. Mendoza sigue su interrogatorio a Andrea, y poco a poco la va acorralando hasta que le pregunta por Mario.

Encarna descubre que Héctor estuvo en su casa hablando con Marta. Tanto ella como Ramón, tratan de averiguar lo que dijo Marta pues temen que se haya ido de la lengua. Andrea es interrogada por Mendoza pero se mantiene en silencio.

Héctor avisa a Mario que un secreta lo está siguiendo. Manolita tiene miedo de que su relación con Mario acabe compormetiendo a Marcelino. Por otro lado, Juanito Grande se enfada con Sole y Leonor.

El traslado de Andrea es inminente. No sabe hacia dónde va pero comienza a temerse lo peor cuando se detienen en un camino solitario. En ese momento, Mendoza le ordena que corra sin mirar atrás. Por otro lado Teresa se siente bien al lado de César.

Ramón se entera de los escarceos amorosos de sus hija con Alfonso a partir de un anónimo. Este decide actuar con contundencia mandando a su hija a Inglaterra.

Ana desvela el secreto y confirma que Marta no es hija suya. Marta da explicaciones acerca de su adopción y eso enfada todavía más a Encarna y Ramón, pues ellos eran partidarios de seguir con esa mentira.

Marta finge estar borracha para que los Rivas la dejen en paz, pero en realidad ha quedado con Ana para ir al despacho de Héctor. Ana y Marta, como víctimas de los engaños de los Rivas, deciden aliarse para descubrir toda la verdad.

Ramón recrimina a Ovidio su pasividad respecto a Héctor. El comisario advierte a Héctor que podría detenerle pero no lo hace porque quiere tenerle en la calle y sin coartada el día que se cometa otro asesinato.

El desajuste de fechas entre el certificado de muerte del abuelo de Ana y la que aparece en su lápida desconcierta a Ana y a Héctor. Marta chantajea a Encarna y Ramón con dejar que salga a la luz la adopción de Ana.

Los Rivas descubren que Ana se ha marchado de casa. Encarna y Ramón montan en cólera. Ramón culpabiliza a Marta y la trata violentamente.

Los Rivas no consiguen encontrar a Ana y Ramón pone detectives tras Héctor. Este se percata de inmediato y tarda en ir al piso que ha alquilado para que Ana desaparezca una temporada. Julieta logra sacar a Lázaro de la cárcel y hace el amor con él.

César reacciona de un modo tranquilo al beso de Teresa. La muchacha recibe la noticia de que César vive con el recuerdo de un gran amor que perdió en la guerra.

José María sigue con su labor de zapa para recuperar su estatus en los almacenes. Marta roba los documentos referentes a la familia de la caja fuerte de Ramón y después de mostrárselos a Héctor, los devuelve a su lugar.

Julieta no quiere escuchar ni a Rosario ni a Pablo, que la visitan para interceder por Celia y ni tan siquiera acepta saber la verdad sobre Lázaro; sólo desea que éste no la abandone y siga diciéndole que la quiere, aunque no sea cierto.

Alfonso salva a Héctor de una paliza y accede a su petición de actuar como enlace entre él y Ana. Ramón informa a Encarna de la entrevista que un programa de radio quiere hacerle a Ana como joven empresaria; el problema es que nadie sabe dónde está.

Héctor logra entrevistarse con Trini, la mujer que cuidó del abuelo de Ana en el sanatorio. Tras confesar que la expulsaron por estar embarazada, Trini lo lleva de nuevo tras la pista del convento de Guadalajara.

Lázaro se muestra arrepentido de su comportamiento, por lo que, finalmente, va al encuentro de Julieta, pidiéndole perdón y reconociendo que se ha enamorado de ella.

César, para impedir que Adelaida vuelva a prostituirse, decide poner fin a su encierro y sale a la calle dándose de bruces con una sorprendida Teresa que va acompañada de su madre.

El cadáver de Lázaro es descubierto por los empleados del Morocco, frente a la puerta del local. Rosario y Pablo, cuando lo encuentran, comunican rápidamente la triste noticia a Julieta. Por otro lado, el niño salvaje sigue en el hospital.

Mario se despide de Ramón y Ana, antes de marchar a París. Finalmente, visita a Marcelino y le comunica que a Andrea la mataron. Ramón se siente superado por el comportamiento de Ana y exasperado por Marta.

Una historia que traslada al espectador directamente a los años de la guerra civil española y a los años de la dictadura franquista, retratando con una fidelidad extraordinaria la situación personal y social que tuvieron que pasar los ciudadanos.

El regreso al trabajo de Teresa y la incorporación de Alfonso se interpreta como un brote de buena suerte entre los García. Pascual desestima la idea de emigrar a Argentina mientras Simón insiste en marcharse porque él no tiene nada que hacer aquí.

Ovidio ha preparado una pequeña cita con la hermana de Beltrán, pero la madre del comisario lo descubre y le monta una escena ante sus subordinados. Sor Angustias va a visitar a Encarna para exponerle su preocupación.

El rumor que lanzó Marta para desacreditar a Ramón llega a oídos de éste y el matrimonio tiene una sonora discusión en presencia de Encarna.

Consternación en el Morocco y en la Plaza de los Frutos por la muerte de Julieta. El dolor por la noticia acerca momentáneamente a Sole y a Juan Grande, pero pronto vuelve a hacerse evidente la distancia que se ha abierto entre ellos.

Ramón manifiesta ciertos problemas para dormir. Encarna le convence para que empiece a tomar un somnífero que el médico le ha recomendado a ella; José María, apremiado por las deudas, urde un plan para ganarse un dinero extra simulando una avería.

Héctor, agobiado, se emborracha y rememora sus fantasmas del pasado. No se quita de la cabeza el asesinato de su antigua novia. Mientras, Simón y Pelayo acuerdan ser pareja de mus en el inminente campeonato de "El Cascabel".

Juanito Grande comienza con su trabajo de viajante de productos de mercería. Sole, para ayudarle, se las arregla para que Manolita le dé la posibilidad de ir a mostrar sus productos a los Grandes Almacenes.

Alfonso quiere mejorar y mostrarle a Ana que no es tan ignorante como parece. Le pide a César ayuda y este se ofrece a instruirle.

Teresa escucha la verdadera historia de amor de César y cree que va a repetir el mismo patrón con Alfonso, por eso evita que se queden a solas.

El Jefe Superior de Policía se presenta en la Comisaría para hacerse cargo del detenido. Encarna sigue confesando la verdad sobre lo sucedido a un horrorizado Ramón, revelándole que ella no adelantó la muerte de su padre porque se quedó embarazada.

Beltrán le pide a Héctor que acepte la versión oficial de los hechos para separar el caso de Ovidio de los otros asesinatos.

Historias de amor durante los años de la guerra civil española.

Marcelino se pone a tricotar en secreto una bufanda para lucirla en el próximo partido Atlétic-Real Madrid.

Una idea genial que ha tenido Jacinto para sacar dinero a los turistas americanos casi termina como el rosario de la aurora. Por suerte, Jacinto les da lo que quieren al final. Por otro lado, Héctor prepara un nuevo viaje a Guadalajara.

Solo la presencia de Clementina logra evitar que se derrumbe; Marta pone a Ana al corriente de sus temores sobre lo que Encarna está tratando de hacer con ella, pero Ana logra convencerla de que todo son imaginaciones suyas.

Juan Grande descubre que Sole estuvo viendo al niño salvaje en el hospicio y la mujer acaba sufriendo una aparatosa caída. Héctor vuelve de su viaje a Guadalajara con noticias: por fin ha encontrado a la niña de Luisa.

Manolita trata de averiguar más datos sobre la familia que ha adoptado a la niña de Luisa y Marcelino le oculta que el padre adoptivo es el asesino de su prima.

La relación de Sole y Juanito sigue sin mejorar pues él dedica todo el tiempo que puede al trabajo y evita ir a casa y estar con Sole, quien sigue muy afectada y continúa con el duelo por el niño que perdió.

Ana descubre a su padre hablando con sinceridad a Marta, inconsciente. La confusión de Ana aumenta cuando se entera de que su padre acudió a Héctor para tratar de esclarecer las causas del incendio.

Marta despierta y Ana le miente, diciéndole que se recuperará; un enfrentamiento ocurre entre Encarna y Ramón a causa del vacío de poder que hay en los Almacenes.

Encarna está haciendo todo lo posible por conseguir que Ana vuelva a casa con Marta, por eso hace que sometan a su nuera a más pruebas. Cuando se confirma que la parálisis es definitiva, Ana decide regresar a casa.

Los Rivas deciden llevar a Marta a casa. Encarna y Ana son partidarias de decirle la terrible verdad cuanto antes, pero Ramón no se atreve y prefiere esperar un tiempo. Por otro lado, Pablo ofrece a Celia volver a actuar en la sala.

Marta ha comenzado a intuir que no podrá andar y tras un sueño en el que ve sus esperanzas rotas, da muestras de negarse a aceptar la realidad que le aguarda. Todos temen que Marta haya empezado a trastornarse.

Marta se da cuenta que está atrapada en un cuerpo inerte y busca refugio en la religión y el alcohol para poder evadirse y superar su angustia; Sole y Juan Grande van recomponiendo su relación y llegan incluso a hacer el amor.

Ramón autoriza a Teresa tomarse el día libre para que pueda estar con Ana y llevarla a distraerse un rato. Teresa provoca sin quererlo un encuentro de Ana con Alfonso donde este acaba confesando su amor por ella.

El carácter de Marta se vuelve cada vez más arisco. Incluso se enfada con Ana, que ya no sabe cómo ayudarla y Encarna se ensaña con Marta. Sole, que ha dormido sola, le cuenta a Manolita los problemas que está viviendo su matrimonio.

Alfonso se siente mal por no haber podido atrapar a un carterista. José María malmete contra él y Alfonso pide disculpas a Ana. Por otro lado, Pascual ve desde el taller a su hijo tonteando con Ana y pone el grito en el cielo.

Encarna no pasa un encargo de Ana a Ramón, lo cual priva a la empresa de unos importantes ingresos. Ella lo hizo voluntariamente para demostrar que ellos están descuidando el negocio.

Pascual no ha pasado la noche en casa. Al enterarse, Alfonso quiere ir a pedirle explicaciones, pero Teresa le hace ver que es una cuestión exclusivamente de sus padres. Cuando Pascual regresa al hogar, se encuentra con su maleta preparada.

Elena demuestra que puede dominar a Marta, hasta el punto de que logra que todos los Rivas, con Marta presente gracias a una silla de ruedas, coman juntos en casa.

Pelayo y Marcelino interceden por Pascual e intentan que Carmen lo perdone, pero ésta se muestra firme en su negativa. Manolita pide ayuda a Sole para que obtenga una foto de la niña de Luisa, haciéndose pasar por una fotógrafa ambulante.

Pascual pide perdón a Carmen y le ruega una oportunidad de enmendarse, pero Carmen se la niega. Pascual decide emigrar con Simón mientras que Elena y Ramón acercan posiciones sobre el trato que se debe dar a Marta.

Leonor juega con sus muñecas y confunde una botella de coñac adulterado con la botella de quina que le dan para estimularle el apetito.

Sole le pide que lleve a Bruno a vivir con ellos. Ramón Rivas desea ayudar a Elena y mete dinero en su bolso. Marta lo descubre y la acusa de estar liada con su marido. Héctor se entrevista con Sor Angustias en su lecho de muerte.

Juanito Grande llega del pueblo con su padrastro Bruno y lo presenta muy orgulloso a todos como su padre.

José Marí anuncia en el Asturiano que Bembarek firmara autógrafos en los Almacenes. Héctor habla largo y tendido con Marta mientras que Sole y Juanito Grande no terminan de aceptar algunas costumbres de Bruno, tan voluntarioso como agotador.

Pascual le comenta a Marcelino sus miedos sobre el viaje mientras que Ana lee destrozada el informe que confirma que es hija de Ramón y Encarna. Por otro lado, Simón y Pascual confirman que no pueden obtener pasaporte debido a sus antecedentes.

Sole y Grande tienen problemas de conciliar el sueño a causa de los ruidos de Bruno. Manolita se las ingenia para no ir a trabajar y convence a Sole para que le deje sacar a pasear a Guille.

Se acerca el aniversario del Morocco, y Rosario quiere conseguir un reportaje para relanzar el local, pero en su lugar reciben la visita de una notaría notificándoles que deben una letra de cambio.

Alfonso cambia la cerradura del piso de Ana. Sin embargo, Teresa entiende que Ana sigue necesitando un buen apoyo e insta a Alfonso a que actúe para ayudarla.

Marta sólo se siente segura al lado de Ana, que ha regresado a casa para cuidarla. La joven logra convencerla para salir a pasear al parque en silla de ruedas. Por otro lado, Encarna está preocupada por la estrecha relación entre Ana y Marta.

Teresa va a ver a Ana con la excusa de una firma urgente de documentos de los Grandes Almacenes, y Encarna le muestra una fotografía de ella y Ana abrazadas, sacada en el estudio de Marta, tiempo atrás.

Celia desempeña su alianza de casada y tiene un mal presentimiento cuando esta cae rodando y se cuela por una alcantarilla de la plaza. José María se ofrece a ayudarla, pero no logra levantar la alcantarilla.

Una historia que traslada al espectador directamente a los años de la guerra civil española y a los años de la dictadura franquista, retratando con una fidelidad extraordinaria la situación personal y social que tuvieron que pasar los ciudadanos.

Pascual aprueba el noviazgo recién iniciado de Teresa y el comisario Perea para que siga adelante. Por otro lado, Carmen pasa su primer día al cuidado de Marta y aunque debe soportar los desplantes de Encarna, comprende que su labor es importante.

Héctor sigue investigando sobre la desaparición de la hija del capitán Samper y tiene la firme convicción de que Manolita es la secuestradora. Por otro lado, Bruno sigue preocupado por la salud de Juan Grande.

Ana descubre que sus cuentas bancarias han sido bloqueadas y no puede hacer uso de ninguna de ellas. Cree que el responsable ha sido su padre y corre a pedirle explicaciones, sin embargo, la responsable ha sido Encarna.

Mientras Ana y Marta desayunan en la habitación de ésta, Encarna y Ramón discuten por el bloqueo de las cuentas de Ana. Por otro lado, Pascual sufre lo indecible esperando a que Simón regrese de la Jefatura Superior de Policía.

Ramón pasa la noche con Elena y no vuelve a casa a dormir. Encarna aprovecha para arremeter contra él y reprocharle sus veleidades sexuales en un momento tan dramático para la familia. Por otro lado, Ana se queda a dormir en casa de los García.

Alfonso trata de evitar que su padre sea detenido y le propone la huida. Sin embargo, Pascual no le hace caso y se presenta en comisaría sin denunciar a Simón.

Pascual ha perdido la confianza en Simón y en todos los que le rodean. En el barrio, la noticia de Pascual ha ido extendiéndose y todo el mundo se solidariza con Pascual sin culpabilizar a Simón.

José María está muy molesto y desilusionado porque sabe que Clementina ha comenzado a salir con un joven de hermosa cabellera. Desesperado por intentar encontrar una solución a su problema de alopecia, decide recurrir a los métodos de un herbolario.

José María recurre al crecepelo de un herbolario para intentar conquistar a Clementina, de quien está completamente enamorado. Rosario, por su parte, ejerce de gerente, demostrando a todos que su nombramiento no fue en vano.

Manolita intenta recuperar su vida y vuelve al Asturiano. Sin embargo, a pesar del amable recibimiento que obtiene por parte de todos, Manolita no logra integrarse.

Teresa se oculta en el vestuario muy avergonzada por haber besado a Ana en el ascensor. Sin embargo, Ana le obliga a afrontar lo sucedido y a aceptar que no hay nada vergonzoso en ello.

Teresa y Héctor viven con pasión y ternura su primera noche de amor. Por otro lado, Ana visita a Alfonso en los Almacenes, donde está haciendo la guardia nocturna y lo seduce en el despacho de su padre.

Ramón continúa con su plan, fingiendo ante Elena como si no supiera nada sobre el envenenamiento. Por otro lado, Carmen y Marta se muestran muy positivas ante el enamoramiento de sus hijas.

Teresa y Héctor recuerdan sus comienzos como pareja y brindan por su noviazgo formal junto a Ana y Alfonso. Por otro lado, Teresa y Carmen visitan a Pascual en la cárcel.

La oposición del Capitán Samper precipita a que su esposa tome la decisión de entregar a su hija a su verdadera familia y tras una fuerte discusión, la niña es finalmente puesta en brazos de Manolita para siempre.

La visita al médico confirma el optimismo de Juanito el Grande. Por otro lado, Bruno le pide disculpas por lo pesado que ha sido con él, aunque Sole no queda convencida con esa conversación.

Ramón descubre el cadáver de Elena tendida en el suelo. Encarna se acerca a él y apuntándolo con una pistola le amenaza diciéndole que todo el mundo creerá que él la mató suicidándose después.

Tras la muerte de Encarna, Alfonso miente ante Teresa para encubrir la versión que da Ramón de lo sucedido y hacer creer de esta forma que encontró muerta a la matriarca de los Rivas en su casa.

Ramón decide contarle al comisario todo lo que sabe de Elena obligado en cierta medida por la presión, pero ocultándole que ella fue asesinada por Encarna. Por otro lado, Héctor y Beltrán inspeccionan el piso de Elena.

Héctor llega a la conclusión de que todos se están encubriendo entre ellos tras terminar el interrogatorio de Marta y Alfonso. Mientras tanto, Rosario sigue sin tener noticias de Celia.

Los Almacenes Rivas cierran en señal de luto durante el entierro de Encarna. Por otro lado, Ana ha decidido ocuparse de Marta durante la ceremonia y le pide a Carmen que la deje empujar la silla de ruedas.

Ana recibe la gran sorpresa de que Ramón Rivas ha firmado los papeles necesarios para ceder todos sus bienes a su hija. Está preparando su viaje con Marta, viaje que hará cuando reciba el perdón de Ana.

Juanito el Grande ha tenido otro de sus desvanecimientos. Por otro lado, Ramón acepta que su hija decida sobre su vida sentimental si finalmente se decanta por Alfonso García.

Ramón agradece a Carmen su dedicación a Marta. Los dos han cortado todos los vínculos con su pasado y están preparados para empezar una nueva vida con el viaje que emprenderán mañana.

Al interrogar a Marta y a Alfonso, Héctor llega a la conclusión de que todos se cubren entre sí. Finalmente, Ramón confesará la verdad y Héctor tomará una decisión convencido de que se ha impartido verdadera justicia.

Se celebra el entierro de Encarna y los Almacenes Rivas cierran en señal de luto. Ana ha decidido ocuparse de Marta durante la ceremonia y pide a Carmen que la deje a ella empujar la silla de ruedas.

Ana encuentra a su padre reunido con un notario en el despacho de los Almacenes. Allí recibe una gran sorpresa: Ramón Rivas ha firmado los documentos necesarios para ceder todos sus bienes a su hija.

Juanito, el Grande ha tenido otro de sus desvanecimientos. Sole, dispuesta a no rendirse, visita al nuevo médico del barrio. Según él, su marido está mal.

Han comenzado los días felices del Morocco. Rosario se propone hacer una reforma y así conseguir más público.

Manolita deja su trabajo en los Grandes Almacenes, y recibe la comprensión de Ana y grandes muestras de cariño por parte de los empleados.

Alfonso y Carmen están muy impresionados por el ascenso de Teresa en los Almacenes. José María la felicita hipócritamente y Héctor agranda su envidia al preguntarle por la Encargada.

Héctor, tras poner en alerta a sus hombres en la comisaría, cuenta a Ana y a Alfonso el peligro que se cierne sobre Teresa con la fuga de Ovidio Salmerón.

Pablo está entusiasmado con el proyecto de reforma del Morocco y, después de que Jacinto arreglara el teléfono, se dispone a llamar a Doña Paquita.

Tras el tiroteo con Ovidio Salmerón, el jefe de policía se presenta en la comisaría y, después de escuchar las explicaciones de Héctor, le comunica que está suspendido temporalmente. Esa noche, Héctor busca refugio en el alcohol.

Héctor, destrozado por lo ocurrido en Comisaría y pasado de alcohol, provoca alboroto en la plaza y es recogido por Marcelino y Pelayo que tratan de animarlo. Beltrán, en el hospital, se recupera de su herida.

La noticia de que Sole y Juan venden el estudio de fotografía causa un terremoto entre los vecinos de la plaza. Manolita y Marcelino intentan que Sole cambie de opinión y busque otro modo de financiar el viaje a Alemania.

José María lo tiene todo arreglado para que un amigo suyo, haciéndose pasar por cura, convenza a Clementina de que ha solicitado la nulidad matrimonial. Un encargo de Teresa de última hora hace que todo salga mal.

Héctor se convence de que va a ser apartado del cuerpo de policía una vez que ha escuchado a su jefe.

La marcha de Bruno ha sido muy dura para Juanito, el Grande, pero más duro es aceptar que tiene que dejar a sus hijos en un internado. En el último momento, convencido de que seguramente les va a truncar su infancia, decide no ir a Alemania.

La hospitalización de Rosa por parte de Mauricio Salcedo crea recelos en la Madre Superiora encargada de la enfermería. Cuando comprueba que Rosa no es familia del médico trata de llevarla a otro pabellón.

Rosario ha estado negociando con el abogado de doña Paquita y ha conseguido una buena indemnización para la cooperativa. Esto la estimula a buscar un local para el nuevo Morocco, pero va a ser más difícil de lo que pensaba.

Jacinto visita el estudio de fotografía de Sole para ver si allí podría abrirse un nuevo Morocco. Marcelino, al enterarse, y temeroso de que eso pueda dañar su negocio, convence a Pelayo para que vaya a quitarles semejante idea.

Alfonso está obsesionado con su primer combate como profesional. El entrenador piensa que no está preparado, pero las ansias del joven por ser alguien en la vida y estar a la altura de Ana Rivas le hacen rechazar sus consejos.

Alfonso se muestra convencido de que ganará el combate de mañana, aunque está asustado, como todos. Ana tampoco le muestra sus miedos.

Clementina y José María tratan de buscar un lugar para poder expresar la atracción que sienten, pero ni en el vestuario lo consiguen. Cuando se encuentran en el ascensor, el motor se detiene y no pueden abrir la puerta.

José María, consternado por el accidente de Clementina, va a visitarla con una buena noticia: ha encontrado un pequeño local para sus encuentros y no volverá a repetirse la situación de los Almacenes.

El golpe que José María se llevó en la cabeza al visitar a Clementina lejos de entristecerlo lo ha hecho un hombre feliz que encara el porvenir con optimismo. Ana termina de escribir a sus padres la carta en la que les anuncia su próximo compromiso.